Problemas más serios de la memoria – En algunas personas mayores, los problemas de la memoria son una señal de deterioro cognitivo leve, enfermedad de Alzheimer o demencia relacionada. Las personas que están preocupadas por los problemas de la memoria deben consultar con un médico. para aprender si el olvido es una parte normal de envejecimiento. Un examen médico completo para evaluar la pérdida de la memoria debe revisar el historial médico de la persona, inclusive el uso de medicamentos recetados y de venta libre y el historial familiar de demencia, y también debe incluir un examen físico y pruebas neurológicas para evaluar la memoria, el equilibrio, el lenguaje y otras funciones cognitivas.
Una diagnosis correcta depende de detalles correctos, de modo que además de hablar con el paciente, el médico puede pedirle información a un miembro de la familia, a la persona encargada de cuidar al paciente o a un amigo cercano. Los exámenes de sangre y orina pueden ayudarle al médico a encontrar o descartar las posibles causas de los problemas de la memoria.
Un escáner cerebral también puede ayudar a identificar o descartar algunas de las causas de los problemas de la memoria. Deterioro cognitivo leve (MCI, por sus siglas en inglés). Algunas personas afectadas con problemas de la memoria tienen un trastorno llamado deterioro cognitivo leve de tipo amnésico.
Las personas afectadas con este trastorno tienen más problemas de memoria que los que normalmente tienen las personas de su edad, pero sus síntomas no son tan severos como los de las personas afectadas con la enfermedad de Alzheimer, y tienen la capacidad de llevar a cabo sus actividades diarias normales.
Las señales de deterioro cognitivo leve incluyen perder cosas frecuentemente, olvidarse de asistir a eventos importantes o a citas y tener más problemas que otras personas de la misma edad al tratar de encontrar las palabras deseadas. Los familiares y amigos pueden notar lapsos en la memoria, y a la persona que tiene deterioro cognitivo leve le puede preocupar estar perdiendo su memoria.
- Estas preocupaciones pueden incitar a la persona a visitar al médico para obtener una diagnosis.
- Los investigadores científicos han encontrado que en comparación, más personas diagnosticadas con deterioro cognitivo leve terminan desarrollando la enfermedad de Alzheimer que aquellas que no tienen ese trastorno.
Sin embargo, no todas las personas que tienen deterioro cognitivo leve desarrollan la enfermedad de Alzheimer. No existe un tratamiento estandarizado para el deterioro cognitivo leve. Típicamente, el médico supervisa y le hace pruebas a la persona afectada cada 6 a 12 meses para detectar cualquier cambio en la memoria y en otras habilidades de pensamiento con el paso del tiempo.
- Ningún medicamento ha sido aprobado para tratar el deterioro cognitivo leve. Demencia.
- Demencia es la pérdida de la capacidad de pensar, recordar y razonar y de las habilidades de comportamiento hasta tal punto que interfiere con la vida y las actividades diarias de una persona.
- La demencia no es una enfermedad en sí, sino un grupo de síntomas causados por ciertas enfermedades o trastornos tales como,
Los síntomas de demencia pueden incluir:
No poder recordar cosas Hacer la misma pregunta o repetir la misma historia una y otra vez Perderse en lugares conocidos Dificultad al tratar de seguir instrucciones Desorientarse en cuanto al tiempo, personas y lugares Dificultad en manejar el dinero y pagar las cuentas
Dos de las formas más comunes de demencia en las personas mayores son la enfermedad de Alzheimer y la demencia vascular. Actualmente, estos tipos de demencia no pueden ser curados. En la enfermedad de Alzheimer, los cambios en ciertas partes del cerebro resultan en la muerte de muchas células nerviosas.
Los síntomas de la enfermedad de Alzheimer empiezan lentamente y van empeorando de forma continua a medida que el daño a las células nerviosas se extiende por todo el cerebro. Con el paso del tiempo, los olvidos se convierten en problemas serios con la memoria, el juicio, la habilidad de reconocer a familiares y amigos, y la capacidad de realizar actividades diarias.
Con el transcurso del tiempo, la persona necesitará recibir cuidados completos. En la demencia vascular, las lesiones en los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro llevan a la muerte del tejido cerebral, a menudo después de o de una serie de derrames cerebrales.
Los síntomas de la demencia vascular pueden variar, pero usualmente empiezan repentinamente, dependiendo de la ubicación y gravedad del derrame cerebral. Las capacidades de la persona relacionadas con memoria, lenguaje, razonamiento y coordinación pueden ser afectadas. También son comunes los cambios del estado de ánimo y de la personalidad.
Algunas personas tienen Alzheimer y también demencia vascular, un trastorno llamado demencia mixta.
¿Qué es la niebla mental?
Algunas personas que se recuperan de COVID-19, ya sea que hayan sido hospitalizadas o hayan tenido síntomas leves, se quejan de efectos mentales y cognitivos persistentes o de lo que se ha denominado como ‘niebla mental de COVID-19’.
¿Cómo se inicia el Mal de Alzheimer?
Los primeros signos y síntomas de demencia de Alzheimer – Algunos de los primeros signos y síntomas de demencia por enfermedad de Alzheimer son:
- Deterioro de la memoria, como por ejemplo, dificultad para recordar eventos
- Dificultad para concentrarse, planificar o resolver problemas
- Problemas para completar tareas diarias en el hogar o en el trabajo, como escribir o usar utensilios para comer
- Confusión con respecto a los lugares o al paso del tiempo
- Dificultades visuales o de espacio, como por ejemplo, no comprender distancias al conducir, perderse o extraviar cosas
- Problemas de lenguaje, como por ejemplo, problemas para encontrar palabras o vocabulario reducido al hablar o escribir
- Mal juicio al tomar decisiones
- Retraerse de eventos laborales o compromisos sociales
- Cambios en el estado de ánimo, como depresión u otros cambios en el comportamiento y la personalidad
La demencia por la enfermedad de Alzheimer puede afectar varios aspectos de tu vida diaria. Cuando aparecen señales de advertencia de esta enfermedad es importante obtener un diagnóstico rápido y preciso.
¿Por qué soy tan olvidadizo?
Enfermedad «de la vida ocupada» – Los científicos lo han bautizado como «síndrome de la vida ocupada». Y afirman que la desmemoria, o el ser olvidadizo, puede ser causado por un estilo de vida frenético o cuando nos vemos constantemente bombardeados con información de teléfonos celulares, televisión, radio e internet.
«La desmemoria es un proceso normal de la vejez, pero tenemos evidencia anecdótica que sugiere que está ahora afectando a gente cada vez más joven como resultado de múltiples ocupaciones en el hogar o el trabajo y por el exceso de información proveniente de los varios medios de comunicación que consumimos hoy en día», explica el doctor Alan Wade, de CPS Research.
«Pero nos estamos refiriendo a algo que no debe ser confundido con una pérdida seria de memoria, la cual sí puede esta relacionada con la demencia presenil». El científico agrega que «este estudio está dirigido a quienes constantemente están perdiendo las llaves, o se olvidan de los nombres de las personas, o que pierden los lentes.
¿Por qué se producen las lagunas mentales?
Etiología – Sus orígenes pueden ser diversos, pero en su mayoría se ven desencadenados por algún ACV (Accidente Cerebrovascular), contusión cerebral, desequilibrios sanguíneos o químicos en el líquido cefalorraquídeo, e isquemias, entre otras causas. Se asocia a pacientes con pérdida transitoria de la conciencia como en los casos de confusión o coma,
¿Cuál es la mejor vitamina para el cerebro y la memoria?
Con el paso de los años, es común comenzar a olvidarse de las cosas o empezar a tener episodios donde la memoria juega una mala pasada, sin tener la necesidad de padecer una enfermedad subyacente. No obstante, existen algunos alimentos ricos en vitamina B que son ideales para fortalecer la memoria,
- La vitamina B es la mejor para luchar contra la pérdida de la memoria, pero los especialistas recomiendan no consumirla a través de suplementos, sino incorporarlas en una dieta saludable y balanceada.
- Asimismo, es importante consultar a un nutricionista para medir las cantidades, ya que consumirla en exceso podría provocar un efecto secundario.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, hay 13 vitaminas esenciales para el funcionamiento, el crecimiento y el desarrollo normal de las células. Sin embargo, en la búsqueda por fortalecer la memoria la más eficaz es la vitamina B, ya que cada uno de sus tipos afecta directa o indirectamente al cerebro. Realizar ejercicio y mantener una vida saludable ayuda a prevenir la pérdida de memoria. Existen ocho tipos de vitaminas B, y todas de ellas colaboran para fortalecer la memoria:
Vitamina B-1 : también conocida como tiamina, este tipo de vitamina B colabora con las funciones de las células y permiten obtener una mayor energía. Se puede encontrar en pistachos y avellanas. Vitamina B-2: también conocida como riboflavina, también ayuda a recuperar energías y descompone grasas y materiales externos como los medicamentos. Se puede encontrar en lácteos. Vitamina B-3: también conocida como niacina, trabaja para producir la grasa y el colesterol que necesita el cuerpo humano, aunque también funciona como antioxidante. Se puede encontrar en pollo y atún. Vitamina B-5: también conocida como ácido pantoténico, permite que las enzimas descompongan los ácidos grasos para lograr una mayor energía en el cuerpo. Se puede encontrar en champiñones, palta y batata. Vitamina B-6: también conocida como piridoxina, ayuda a prevenir enfermedades, entre ellas el cáncer. Se puede encontrar en nueces y cereales. Se puede encontrar en la palta y las pasas de uva. Vitamina B-7: también conocida como biotina, regula las señales celulares para una comunicación rápida y eficiente en el cerebro. Se puede encontrar en carne de cerdo y legumbres. Vitamina B-9: también conocido como ácido fólico, permite la función óptima de los neurotransmisores y la salud cerebral, además de favorecer la desintoxicación celular. Se encuentra principalmente en verduras verdes y frutos rojos. Vitamina B-12: también conocida como cobalamina, es clave para la formación de glóbulos rojos y ADN, y colabora en el desarrollo del sistema nervioso. Se puede encontrar en pescados, carne, pollo, huevo y leche.